El metal es uno de los materiales más utilizados para la fabricación de herramientas y piezas básicas en sectores como la automoción y el bricolaje.
En la sociedad y en casa tenemos muchos objetos , pese a su resistencia, está expuesto a diferentes formas de deteriorarse, entre las que está la de oxidarse por diferentes motivos, como el propio transcurso del tiempo.
Quitar el óxido con vinagre del metal
El vinagre de manzana es un producto que, utilizado correctamente, elimina el óxido. Su componente ácido actúa y acaba con el moho acumulado en las herramientas. En este sentido, el vinagre blanco también sirve ya que contiene la acidez necesaria para quitar la parte oxidada. Sigue este sencillo paso a paso con el que descubrirás cómo quitar el óxido con vinagre:
-Vierte sobre un recipiente el vinagre de manzana o blanco.
-Cubre la pieza con el vinagre vertido.
-Déjala sumergida durante toda una noche.
-A la mañana siguiente, frota con una esponja o un cepillo las partes oxidadas de la pieza.
-Si continúas observando óxido incrustado, deja en remojo la pieza nuevamente, pero en este caso durante dos noches consecutivas.
-Vuelve a frotar con una esponja para comprobar que se quita el óxido.
Quitar el óxido con bicarbonato
El bicarbonato de sodio es un producto natural eficaz para quitar el óxido . Además del factor natural, cuenta a su favor la seguridad para la salud que conlleva su uso y la adquisición a un precio económico. Para descubrir cómo quitar el óxido con bicarbonato de sodio, te recomendamos que sigas este paso a paso:
-Humedece con agua el bicarbonato de sodio.
-Aplica el bicarbonato sobre las piezas que estén oxidadas.
-Con la ayuda de un cepillo o una esponja, frota la pieza con el cuidado necesario para no dañarla.
-Enjuaga la pieza con agua para deshacerte del bicarbonato y de los restos de óxido.
Quitar el óxido del metal con papel de aluminio
El papel de aluminio es un recurso que debes tener en cuenta si quieres saber cómo quitar el óxido de un metal de forma casera. Disponiendo de este material, podrás conseguirlo prácticamente al instante. Para conocer con detalle cómo quitar la corrosión del metal con papel de aluminio, sigue estos sencillos pasos:
-Corta el papel de aluminio en trozos pequeños (aproximadamente en 3 cm2).
-Sumerge los trozos en agua.
-Saca los trozos de papel de aluminio del agua y frótalos sobre las piezas de metal que estén oxidadas.
-Ve rotando los trozos a medida que lo consideres necesario.
-Podrás detectar desde el primer instante cómo el óxido va desapareciendo, recuperando de esta manera la brillantez del metal.
Si te ha sucedido esto, no tienes por qué tirarlas porque la situación es reversible. Puedes solucionar el deterioro del material y continuar disponiendo de las herramientas o los objetos metálicos que han sufrido este problema con estos tips.